jueves, 23 de junio de 2016

Breve historia del diseño industrial.

El diseño antes del diseño.

Desde los tiempos prehistóricos, el hombre creo objetos para satisfacer distintas necesidades prácticas. Dichos objetos suelen estudiarse en el contexto del desarrollo tecnológico, más que del diseño, pero es importante reconocer que todos fueron diseñador por uno o varios diseñadores innatos quienes les dieron determinad forma para garantizar su buen funcionamiento y uso.

Con el paso del tiempo, estas creaciones fueron perfeccionándose, desde las primitivas herramientas hasta los más sofisticados mecanismos, lo cual dio pauta al desarrollo pleno del diseño industrial, correspondiente al apogeo de la Revolución Industrial del siglo XIX.

ARTE MOBILIAR
El arte mobiliario o arte mueble (también llamado arte miniatura o arte portátil) consiste en figuras y objetos decorativos tallados en hueso, cuernos de animal o piedra o modelados toscamente en arcilla, normalmente para el uso en la vida cotidiana.
El estudio de los orígenes de la creación de los objetos útiles, puede remontarse a la prehistoria. Fue en el Paleolítico, cuando, golpeando piedras de distinta dureza, el hombre comenzó a fabricar utensilios y herramientas. Con el correr del tiempo y los inicios del Neolítico, el desarrollo de la alfarería y a partir de la llamada Edad de los Metales, el dominio del bronce, permitió crear nuevos objetos relacionados con el transporte, la defensa, la vivienda, el vestuario y los utensilios domésticos.
Hachas planas en bronce y dos puntas.


Durante la Edad Media se crearon nuevas herramientas, utensilios y las primeras máquinas que ayudaros al surgimiento de nuevas industrias y a su vez estas estimulaban el comercio entre las ciudades emergentes.

Las grandes ciudades, los miembros adinerados y la iglesia comenzaron a exigir objetos más elaborados que estimularon la especialización técnica, el virtuosismo y la producción en serie de los objetos propios de la Europa medieval. Las organizaciones gremiales garantizaron el uso correcto de las técnicas de producción y el profesionalismo de los artesanos durante mucho tiempo.

A partir del Renacimiento, el Barroco y el Rococó algunos visionarios reconocieron la importancia del diseño en el éxito comercial de un producto, de aplicar la investigación y los adelantos tecnológicos como medios para garantizar la producción en serie y minimizar los costos de producción.
Reloj en bronce dorado con guarnición de candelabros de estilo Rococó.

Jarrón del Renacimiento.


Así comenzó la fructífera separación entre el artista que diseña un producto y el artesano que lo elabora, dando paso a una nueva etapa en el desarrollo del diseño, previo a la Revolución Industrial.

Fuente: Diseño Industrial Mexicano e Internacional “Diana Comisarenco”

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